A la cola pese al plan
16 de Junio de 2003
El Gobierno ha reconocido, bien que con todo tipo de salvedades, que no ha cumplido dos de los objetivos principales propuestos en el campo de la ciencia y la difusión de las tecnologías. Dos años y medio después de planteado, el plan Info XXI, que pretendía dar un impulso decisivo a la utilización de las tecnologías de la información en hogares, colegios y centros de trabajo, no ha impedido que España siga estando a la cola en la utilización de estas tecnologías, en particular en el uso de Internet, y no se han visto las actuaciones ni las inversiones que eran de esperar. El otro objetivo no alcanzado es el de aumentar el porcentaje del PIB dedicado a I+D hasta la media europea (2%).
No se puede pretender modificar de forma significativa el ámbito de la investigación y el desarrollo, en constante crecimiento y con un déficit secular en nuestro país, sólo con palabras y sin aceptar el compromiso de un incremento sostenido a lo largo de años. Es verdad que el sector privado, fundamental en otros países, no tienen el suficiente dinamismo en el nuestro y contribuye menos de lo que debiera a este capítulo. Pero será difícil que se produzca un cambio si antes el Gobierno no manda una señal clara de que se trata de una de sus prioridades. Una señal que debe comprender un liderazgo con presencia en la comunidad de los investigadores y los innovadores, peso político y recursos suficientes
Editoral de El País