Privacidad y libertad de expresión, en peligro
4 de Mayo de 2004
El principal peligro que acecha a nuestra libertad de expresión y nuestro derecho a la privacidad no es la paranoia gubernamental, sino la avaricia privada. La avaricia y las leyes que la sustentan, al permitir a las empresas bloquear nuestros caminos en la red o seguir nuestros movimientos dentro y fuera de Internet en el nombre de unos supuestos beneficios económicos que no existirán jamás. Alguien debiera explicarle a las empresas que entre las mejores maneras de fomentar ventas no están recortar los usos de sus productos o someter a seguimiento a sus clientes.
Y es que las empresas está reaccionando de forma enloquecida y contraproducente a lo que perciben como un ataque con ensañamiento sobre sus activos. En lugar de pensar con cuidado qué es lo que más les conviene en el nuevo mundo de Internet, lanzan denuncias judiciales sin cesar y presionan para que se fabriquen nuevas leyes restrictivas). Un ejemplo son los reiterados intentos de la prensa danesa para prohibir que otros enlacen sus artículos... que los jueces han terminado desechando, y no por la razón más obvia: quien sale favorecido de los enlaces es el enlazado.
Como parte de esa reacción la industria está enfrentándose directamente con el sentido común y los más elementales derechos de sus clientes. Y esto no es más que el principio: los formatos de gestión de derechos de propiedad intelectual que informan a los `propietarios de qué se hace, dónde y cuándo pueden ser un problema., Pero ¿qué ocurrirá cuando las 'etiquetas chivatas' estén en todos los artículos de consumo? ¿Quién, si es que hay alguien, nos protegerá de la avaricia y la cortedad de miras de las empresas?
WebLog Retiario de José Cervera en El Navegante