Gregorio Giménez Román, trabajador de Deutsche Bank durante 30 años, fue despedido por el banco, que aportó como prueba en el proceso laboral los correos electrónicos que éste envió desde su puesto de trabajo

El trabajador ha interpuesto ahora una denuncia penal contra el banco, que ha sido admitida a trámite por la jueza del juzgado de Instrucción número 2 de Barcelona, que ha acordado citar a declarar como inculpados a José Garay Echegaray, director general de Deutsche Bank, Juan Ruiz Alcalde, subdirector general, José Antonio Soler, director de relaciones generales, y Albert Faulín, director de seguridad lógica.

José Antonio Soler, según figura en un e-mail aportado por el propio Deutsche Bank en el proceso laboral, ordenó a Albert Faulín que se interceptara el correo del trabajador Gregorio Giménez, imprimiendo su contenido.

Se trata del primer caso denunciado en España por interceptación de correo electrónico a un trabajador, al amparo de lo dispuesto en el artículo 197 del Código Penal, que establece una pena de hasta siete años de cárcel para dicha conducta.

El letrado que ha asumido la defensa del trabajador es Carlos Sánchez Almeida, http://www.bufetalmeida.com , colaborador de la Asociación de Internautas, http://hemeroteca.internautas.org y de Kriptópolis http://www.kriptopolis.com en la campaña por la privacidad de las comunicaciones electrónicas en el trabajo